Medianoche

Medianoche
Originally uploaded by Daniel Garcia Espinoza

Tan lejos...

Recuerdo un cineclub
Un film monocolor
igual que ayer
estabas ausente

Tiempos de ocio
olor a libertad
igual que ayer
estabas lejos

El corazón arrugado
mi garganta seca
igual que ayer
eras presa del enojo

Igual que el cineclub
Igual que aquél film
Estás tan lejos
Estás tan cerca.

Pero ayer, precisamente ayer
nunca estuviste tan distante.

Es que ya te fuiste?
O es que ya no estoy?
Igual que aquel film
Estás tan lejos, tan cerca.

Coraza

Coraza azul
Flechas en dirección
Profundo, muy adentro
Tiembla el mundo, tiembla un sol

El acero no se hizo para mí
Ni para tí
El olor calma la tempestad
La noche la acompaña

Ahora estoy desnudo
A merced de tus deseos
Me dejaste sin armas
Me dejaste sin habla

Remover los escombros
Intentar otra vez
Jugar a ser Dios
Jugar a ser tu

Morfeo se burla
Mis ganas son grandes
Mis miedos también
Tú a la distancia
Yo en un viaje astral

Risky Business

Sí, Manuel dijo, "nunca más lo volveré a hacer".
Manuel solía jugar inconcientemente con los sentimientos... con los suyos y con los ajenos. Y si bien aun no ha salido mal parado de esos juegos, el riesgo sigue latente. Ahora duda en retomar esos ya conocidos juegos, sabe a lo que se expone, ya que el escenario de hoy es bastante complejo.
Y quién es la nueva víctima?
Una muchacha que al parecer -en una etapa anterior- tenía el mismo modus vivendi que Manuel. Hoy ya no es lo mismo, las experiencias enseñan mucho, sin embargo la tentación es peligrosa. Nadie sabe si ese maldito juego empezará una vez más y menos aun en qué terminará. Pobre Manuel.

Oh sorpresa!

(este post es real, nada es figurativo ni de ficción)

¿Por qué carajo pasan estas cosas?
Nos damos una segunda oportunidad, empezamos super pilas y oh sorpresa!, uno de los componentes no era tan bueno como se esperaba. Ni modo, una piedra más en el camino...qué importa....veamos cómo solucionamos el tema.
Se soluciona el tema, continuamos con el proyecto y ahora necesitamos consolidarlo. y oh sorpesa!...nuestro presupuesto, ese que nos permitirá dejar el anonimato, es tan útil como un cortauñas para manco.
Ta mare!

No importa....AGUANTE BANDA!!
Hacer música en el Perú es tan jodido como tomar sopa con tenedor, pero tan satisfactorio como ver a tu hijo sonreir.

El tiempo

Si pues, en definitiva el tiempo apacigua lo que sea. Han pasado tan sólo unos meses desde que empecé a sentir una constante agitación.... ansiedad que le llaman. Hoy la perspectiva es otra. Miro hacia atrás y lo que me queda son excelentes recuerdos, risas, el corazón en la boca, excitación, peligro, subidas y bajadas, y la sensanción de vivir la vida en un segundo, a punta de vértigo y emociones intensas.
¿Hasta cuando? el tiempo también se encarga de inquietar las cosas y colocarlas en su sitio nuevamente.

Las tardes soleadas

¿Una constante? ¿Una coincidencia?
Una despedida o una bienvenida, el corazón arrugado y la garganta hecha nudos.Nada más deprimente que una tarde soleada para sentirse ínfimo, cual hormiga en el pavimento hecha trizas por una sucia combi.

La casa rosada

...la escena parecía sacada de alguna película ochentera para quinceañeros, de esas estilo Porkys. Pero esto era real. El día anterior había cumplido 15 años – si mal no recuerdo- y he ahí yo, en la casa del popular Simon, un especie de pendejo con visos de retardado mental...pero con plata. Éramos como 15 pubertos buscando un jebe en el dormitorio de Simon, en no más de un minuto. Ese objeto que supuestamente nos daría la bienvenida a ese mundillo tan sólo contemplado -hasta ese entonces para muchos- en revistas o conversaciones calenturientas de adolescencia.Una vez todos con jebe en mano, subimos a dos camionetas pickup rumbo a Miraflores. Al llegar, nos da la bienvenida una casa rosada, ..sí rosada...y en el segundo piso, una variopinta fauna de mujeres dispuestas a satisfacer nuestros deseos más sublimes y perversos (eso me suena conocido). Naaaa pura farsa. Nada más parecido a una transacción bancaria o a la compra de un combo en un fast food. Terminada la faena y de regreso a casa, me sentía la persona más estúpida del mundo. Vacío.